Los peligros de comprar un coche en la calle

La crisis ha hecho que florezcan las ventas de coches en la vía pública. Muchas veces se hacen pasar por profesionales, pero no ofrecen todas las garantías de concesionarios y compra ventas.

Fue Ganvam, la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor, la que la semana pasada alertaba dela situación. Aumenta un 20% las ventas de coches en la calle. No se refieren a vendedores particulares, sino a mafias que se hacen pasar por vendedores profesionales para comercializar vehículos de segunda mano.

La asociación asegura que un 10% de las ventas de particulares son ventas pirata, lo que supone unas 95.000 unidades comercializadas cada año bajo esta modalidad fraudulenta.Gamvam advierte de que el fraude se gesta, generalmente, en pequeñas reuniones entre particulares o “concesionarios ambulantes” en grandes aparcamientos de centros comerciales.

Para Ganvam esta práctica supone una clara competencia desleal para los concesionarios de marca y compraventas que operan conforme a la ley. No cuentan con las autorizaciones municipales para desarrollar su actividad, no pagan impuestos ni están dados de alta en el Impuesto de Actividades Económicas. Este mercado negro genera al sector automovilístico unas pérdidas anuales de 300 millones de euros y promueve la economía sumergida, ya que se trata de un fraude a la Hacienda Pública al evadir el pago de los impuestos relacionados con el IVA o el Impuesto de Sociedades que sí pagan concesionarios y compraventas profesionales.

Pero ¿por qué comprar a un profesional, como recomienda Ganvam? Aseguran que cuando se compra a un particulare (se haga pasar por un porfesional o no), el usuario no cuenta con la garantía de dos años que por ley están obligados a entregar. Pero hay cinco motivos más:

Contrato de compraventa y factura de la operación.
Revisiones cubiertas.
Búsqueda de la satisfacción para fidelizarle.
Fiabilidad técnica y administrativa.
Asesoramiento.
Para erradicar esta práctica, Ganvam defiende crear una norma de ámbito estatal, tomando como antecedente las ordenanzas municipales aprobadas, que prohíba expresamente la venta de vehículos en la vía pública, con apertura de expediente sancionador y multa en caso de incumplimiento. Ganvam ya se ha dirigido en distintas ocasiones a la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) para que estas medidas adoptadas por algún ayuntamiento (Madrid, Barcelona, por ejemplo) se extiendan a todos los municipios de España