¿Vas a vender el coche y prefieres cambiar las gomas para guardarte aquellas que has comprado recientemente? O más común aún, ¿Vas a comprar unos neumáticos nuevos para pasar la ITV pero posteriormente volverás a quitarlos y guardarlos? Te explicamos en este artículo cómo debes de guardar y almacenar los neumáticos del coche para que se conserven en perfecto estado.
También podemos aplicar estos consejos para guardar aquellos neumáticos de invierno o los del resto del año que usamos durante unos meses y que, después, pasan a nuestra zona de almacenaje a la espera de volver a ser calzados por nuestro coche. No vale cualquier sitio para almacenar unos neumáticos durante largos periodos. Las superficies de las gomas se secan y se agrietan. Los neumáticos deben de guardarse en un lugar ventilado, seco y limpio.
Si has pensado en tu garaje como el lugar idóneo para guardar los neumáticos que no vas a usar, debes de asegurarte de que los dejas alejados del calor que provocan las tuberías calientes y los generadores eléctricos. También deben de estar situados en un lugar limpio de grasa, combustible y otras sustancias químicas que pueden deteriorar las gomas. Y es que, en caso de entrar en contacto con productos químicos dañinos, los neumáticos podrían quedar totalmente inservibles.
Por otra parte, debes de asegurarte de que la luz del sol no incida directamente sobre los neumáticos. Además, recuerda que, en caso de que vayan a estar largos periodos de tiempo guardados, debes de, periódicamente (cada mes aproximadamente), girarlos para invertir su orden y evitar deformaciones. En ningún caso coloques sobre los neumáticos objetos pesados. En caso de que los neumáticos estén montados sobre la llanta, deben almacenarse inflados y en posición vertical, sin apilarse.